REGULACIÓN DE EMOCIONES

 

Son numerosas las cantidades de emociones que las personas tienen al día, y ni hablar de los niños, estos experimentan paulatinamente emociones al desayunar, al bañarse, en fin, al llevar a cabo cualquier tipo de actividad, y dado que las emociones están presentes en la mayor parte del tiempo en el que el pequeño esta interactuando, se deberá tener un control en cuanto a regular estas emociones, los niños teniendo una edad temprana es complicado tener una regulación emocional estable, es decir que para estos niños es casi imposible regular sus emociones ante diversas situaciones o eventos, como por ejemplo en casa muchas veces los pequeños crean conflicto al no tener control de sus emociones, un ejemplo claro es cuando mamá pide al hijo se coma las verduras antes que los dulces, el pequeño no tiene la mejor reacción y  reacciona con llanto al no tener lo que el pide en el momento que desea, esto le va a generar emociones que no va poder controlar y por ende creara mas conflictos. Las emociones son impredecibles y suceden en cualquier momento pero justo la regulación emocional nos apoyara a que estas emociones se puedan ir controlando poco a poco con el propósito de no generar conflicto o bien  que el niño no se sienta avergonzado o evidenciado.

“La regulación emocional es la capacidad para dirigir aquellas emociones de manera oportuna. Deduce tomar conciencia del enlace entre emoción, cognición, y comportamiento; así como tener excelentes estrategias de afrontamiento; con la capacidad para autogenerarse emociones positivas, etc.” ( Bisquerra Alzina & Pérez Escoda, 2007, pág. 10)

 

( Bisquerra Alzina & Pérez Escoda, 2007, pág. 10) Menciona que hay micro competencias que han de formar la regulación emocional como lo es:

 

Expresión emocional: esta es entendida como aquella capacidad de poder expresar emociones de manera adecuada, el poder comprender que el estado emocional interno no necesita contestar con la expresión externa que tiene la persona misma para con los demás. En un grado de mayor madurez, comprende el impacto de la propia expresión emocional en otros, tiene la facilidad para tener en cuenta la forma de mostrarse a sí mismo y a los demás.

Es importante que los pequeños tengan una expresión emocional regulada, es decir que estos manifiesten estas emociones sin llegar a reprimirlas, pero con seguridad y con la certeza de no perjudicar a otras personas.

 

Para ( Bisquerra Alzina & Pérez Escoda, 2007, pág. 10) la regulación emocional entiende que los propios sentimientos y emociones con frecuencia deben de ser reguladas, con ello involucra otros aspectos como la regulación de la impulsividad  como pueden ser la ira o la violencia o bien comportamientos de riesgo, se debe tener una tolerancia a la frustración para con ello poder prevenir situaciones o estados emocionales negativos que afecten a la persona  algunos de estos pueden ser el estrés, la ansiedad o bien la depresión y salvaguardar  el logro pese a las dificultades.

 

Los sentimientos y las emociones a menudo nos traicionan en el momento no apropiado, las personas adultas aún teniendo un cierto grado de madurez, les es difícil esta regulación de emociones, entonces para un niño esta regulación se vuelve aún más compleja puesto que no tienen está regulación emocional sentada, los niños a menudo dicen lo que piensan y no tienen la capacidad de prever lo que puede pasar, por ello se  deberá de hacer mucho hincapié en el control de las emociones, que los pequeños comprendan que estás emociones se pueden transmitir de una manera tranquila y pacífica sin llegar a extremos como la violencia o bien el enojo por parte de estos, una regulación emocional cimentada lograra en el niño una mejor calidad de vida a largo plazo.

 

Habilidades de afrontamiento: se debe de tener previamente estructurada la habilidad para poder afrontar emociones negativas qué puedan suscitarse a través de la implementación de estrategias de auto regulación con la finalidad de mejorar la intensidad y la duración de dichos estados emocionales ( Bisquerra Alzina & Pérez Escoda, 2007, pág. 10).

 

Muchas veces los niños no pueden afrontar las emociones negativas que viven en diversos periodos del día, puesto que no se tiene una auto regulación de emociones y es por ello qué es más difícil poder afrontarlas, a menudo  los pequeños viven experiencias positivas y negativas las cuales pueden repercutir en su desarrollo y bienestar emocional, si no se busca la manera de poder controlar dichas emociones, esta habilidad de afrontamiento va a ser de utilidad en caso de que se pierda esta regulación emocional, el niño tendrá que actuar y buscar una solución al daño que se haya provocado de la emoción negativa.

 

De acuerdo con ( Bisquerra Alzina & Pérez Escoda, 2007, pág. 10) las competencias para auto generar emociones, proporcionan la capacidad de poder experimentar de manera voluntaria y sensata emociones positivas como la alegría o bien el amor y con ello disfrutar de la vida plenamente. Esta capacidad permite la autogestión del propio bienestar y proporciona una mejor calidad de vida.

 

Las emociones tienen una gran influencia dentro de la calidad de vida de los pequeñines, puesto que estas determinan un poco sobre cómo es la vida a través de emociones positivas o bien negativas, estas emociones pueden favorecer o repercutir en el bienestar de los alumnos, es por ello que se tiene que fomentar a menudo la gestión de emociones positivas en la mayor parte del tiempo, sin embargo será imposible que el niño pueda tener solo emociones positivas  ya que en la vida existe lo bueno y lo malo, y será inevitable que el alumno experimente emociones negativas pero si se podrá hacer que tenga la capacidad de poderlas transformar en positivas y que tenga una vida plena.